Llegan estos días en que todos los años, los que nos dedicamos a la docencia, bajamos un poco el ritmo y para todos llegan días de descanso, fiesta y familia.
En general se respira un ambiente de cordialidad y buenos deseos.
Entre esos miles de buenos deseos que circulan por la red (Whats’app, Facebook, Twitter, etc.) e incluso en persona (aunque estamos perdiendo esta buena costumbre) yo me quedaría con sólo uno: